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Domingo 20 de diciembre de 2009
Por el derrame de líquidos cloacales crudos hacia la ría
Desde PUMA se denuncia que la costa local está contaminada
* "Le pedimos a la gente que vaya a Arroyo Pareja que tenga cuidado al ingresar al agua", dijo Nicolás Toledo.
* María Eugenia Mairal sostuvo que pueden tener problemas los niños y las personas de piel sensible. En cuanto al consumo de pescado, opinó, que "no comería, sobre todo los de fondo".
* Los pescadores ya habían alertado sobre la aparición de peces con deformaciones y el alejamiento de especies desde la ría de la bahía Blanca.
Nicolás Toledo, presidente de la organización no gubernamental Padres Unidos por el Medio Ambiente, denunció que a raíz del cese de los trabajos de remodelación de la planta depuradora de la empresa Aguas Bonaerenses, "los líquidos cloacales de toda la ciudad llegan crudos a la ría (de la bahía Blanca)".
"Las obras se pararon, la planta no está depurando, está pasando el líquido en crudo y va directamente a la ría. Ahora llegamos al verano, se inauguró la temporada estival en Arroyo Pareja y desde PUMA estamos recomendando que se tenga cuidado porque el desagote de líquidos cloacales se produce a metros del lugar donde se baña la gente", indicó.
Mencionó que "hay que tener mucho cuidado si se piensa ingresar al agua. Si bien no tenemos el grado de contaminación de esa zona, el hecho de que vayan los líquidos cloacales crudos ya demuestra que hay una contaminación que puede ser, en algunos casos, peligrosa".
Sostuvo que el derrame del líquido cloacal afecta a todo el frente costero local, desde Arroyo Pareja hasta Villa del Mar y "un poco más también hacia el sector de Bahía Blanca. Cuando está la subiente, ingresa a la bahía y las seis horas de marea no le dan el tiempo suficiente al agua como para arrastrar los líquidos cloacales hacia afuera".
En tanto hacia la zona de Punta Ancla (en Baterías) "nosotros pensamos que no está afectada y por lo tanto sería apta para el verano".
Explicaciones. Toledo mencionó que mantiene contacto con el Ministerio de Infraestructura, con Cristina Alvarez Rodríguez, a quien "le cursamos una notas por el retiro de la empresa que estaba repotenciando la planta depuradora de ABSA".
"Nadie nos quería contestar de la firma adjudicataria. Por eso pedimos información a la Provincia para saber cuándo se retomarán las obras. Esto está detenido porque no se pagaron las certificaciones de obra. Ahora estamos sufriendo las consecuencias y peor aún lo vamos a sufrir en unos días más cuando empiece el calor en serio", dijo.
Sostuvo que los trabajos que se hicieron hasta el momento, en las instalaciones de ABSA ubicadas en el centro de Ciudad Atlántida, "en gran parte servirán, pero en otras no. Por ejemplo, se está desmoronando una excavación que habían hecho para un piletón de barros activados. La obra debe continuar y se tiene que hacer una cosa cierta y seria".
"Las condiciones en las cuales estamos --continuó Toledo-- son deplorables. Nadie dice nada. Todos miran hacia otro lado. Hay una ausencia política muy grande sobre la cuestión".
A la espera del OPDS. Toledo sostuvo que tienen conocimiento que llegarán a nuestra zona profesionales del Organismo Provincial de Desarrollo Sustentable (OPDS), por pedido del gobernador Daniel Scioli.
"No sabemos qué día llegarán. Es costumbre del gobierno de Buenos Aires no dar precisiones sobre la fecha de arribo y tampoco sabemos qué trabajo harán. Pero lo importante es que hagan un trabajo serio y que realmente informen lo que tienen que informar", dijo.
"Al ser un organismo de gobierno --siguió-- tiene que ser serio porque, de lo contrario, vamos a continuar con los mismos problemas de siempre con la contaminación".
Indicó que en Bahía Blanca se determinó no inaugurar el balneario Maldonado y "creo que alguna medida definitiva se tiene que adoptar desde la Provincia. No puede haber más ausencia política. Debemos tomar las cosas en serio porque esto es parte de la calidad de vida de todos los habitantes de Bahía Blanca y Punta Alta".
"Las autoridades políticas de Punta Alta deberían hacer lo mismo que las de Bahía Blanca o, al menos, informar sobre los cuidados que se deben adoptar", dijo Toledo.
La preocupación de los pescadores
El representante de PUMA dijo que es legítimo el reclamo de los pescadores de Bahía Blanca y Punta Alta.
"El reclamo está hecho con mucha razón. La contaminación que están teniendo del Polo Petroquímico y nosotros, desde aquí, ayudando con la planta de residuos cloacales más los dragados, cuyos vaciaderos están frente a Puerto Rosales, ayuda a que los pescadores se queden sin trabajo", dijo Toledo.
Cabe recordar que, días atrás, los trabajadores de la pesca de Coronel Rosales, nucleados en la Cámara que preside Marcelo Maldonado, también denunciaron la contaminación de la ría.
El propio titular de la Cámara de Actividades Pesqueras de Coronel Rosales habló sobre la deformación y el alejamiento de los peces.
"El agua tiene niveles un poquito
altos de contaminación fecal"
En tanto la licenciada en Ciencias Biológicas y magíster en Gestión Ambiental del Desarrollo Urbano, María Eugenia Mairal, dijo que en realidad el tema se había hablado hace bastante tiempo y "tiene que ver con que el agua de Arroyo Pareja está teniendo niveles un poquito altos de contaminación fecal".
"Lógicamente si sale sin tratar el agua que proviene de los desechos cloacales, porque la planta de calle Dorrego no está en pleno funcionamiento, se presenta en el balneario materia orgánica y siempre el riesgo es que haya materia fecal que entre por boca en los niños que tragan agua cuando están jugando o le ocasione inconvenientes a las personas con más sensibilidad en la piel", explicó.
Mairal expresó que las personas que tienen intenciones de ingresar al agua podrían refrescarse en el mar y luego tomar una ducha afuera. "Hay que tener cuidado con los pequeños porque los grandes tenemos más precauciones y no nos vamos a llevar el agua a la boca, a los ojos o a la cara", dijo como medida preventiva.
"No sé si no bañarse, si es tan drástico. Si no qué desahogo tenemos. En Mar del Plata, en verano, los niveles de fecales aumentan muchísimo y la gente se baña igual", dijo.
Consumo de pescado. En cuanto a lo que están observando los pescadores, la licenciada Mairal sostuvo que se trata de un fenómeno que "quizás tenga más que ver con otro tipo de sustancias, que no sean orgánicas como la materia fecal, sino aquellas que están depositadas en los sedimentos, tales como metales pesados, residuos de hidrocarburos o derivados de petróleo".
"Estos pueden ser sumamente tóxicos porque se incorporan químicamente al tejido graso o las membranas celulares que tienen lípidos. Estaría relacionado más con ese fenómeno y con el de biomagnificación o bioacumulación que va sufriendo a medida que pasa por toda la cadena alimentaria", dijo.
Sobre el consumo de pescado, Mairal adhirió a las palabras del licenciado Leoncio Montesarchio: "Hasta que no estén las pruebas científicas acabadas que digan que los peces tienen determinados contaminantes, por las dudas, personalmente, el pescado de acá no lo comería, sobre todo si es de fondo. Sí puedo consumir merluza que viene de Mar del Plata".
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lunes, 21 de diciembre de 2009
EFECTOS DE ALGUNOS CONTAMINANTES EN AMBIENTES ACUATIVOS
HIDROCARBUROS: por ser muy solubles en lípidos (tejido graso) tienden a causar daños en las membranas celulares de todos los seres vivos, en general.
En ecosistemas acuáticos como el Estuario de Bahía Blanca o el Río de la Plata, los hidrocarburos suelen afectar los estadios larvales (o sea formas juveniles de invertebrados y/o algunos peces).
Las partículas de petróleo se depositan junto con los sedimentos pudiendo dañar a bivalvos y crustáceos tornándolos no aptos para el consumo dado que la exposición crónica a diferentes derivados del petróleo puede tener efectos cancerígenos en la especie humana
METALES PESADOS: La exposición a dosis elevadas interfiere con el funcionamiento de enzimas y proteínas necesarias en el metabolismo celular.
Su toxicidad está además asociada con la forma química en que puedan presentarse, ya que esto impacta sobre su solubilidad en los tejidos vivos.
Pueden provocar desde anemias por disminución en la síntesis de hemoglobina, hasta daño renal y hepático crónico, hipertensión, se ha relacionado inclusive el mal de Alzheimer con el aluminio. El cobre es muy tóxico para los vegetales acuáticos y terrestres porque disminuye la tasa fotosintética, e inhibe el crecimiento.
Estos metales pesados como el cobre, cinc, plomo, cadmio, aluminio, o mercurio pueden modificar variables en el agua variando la solubilidad del oxígeno en el medio acuático o su grado de acidez. Estos factores son determinantes para las diferentes especies de algas del fitoplancton y para el zooplancton. Sabemos que el oxígeno es imprescindible para la respiración de los seres vivos, y los organismos acuáticos, incorporan el que está disuelto en el agua, a diferencia de los terrestres que lo tomamos del aire.
Además los metales pesados sufren un proceso llamado de biomagnificación por el cual van concentrándose más a lo largo de la cadena trófica acuática, uniéndose básicamente a los lípidos (grasas) o proteínas de los organismos vivos.
Tiene una concentración , quizás baja en el agua o sedimento acuático, y va aumentando cuando ingresa al fitoplancton, y aumenta aún más cuando este sirve de alimento al zooplancton, y más todavía cuando estos son el alimento de invertebrados mayores y peces, y, finalmente, más, cuando las aves o mamíferos se alimentan de ellos.
Es más, un animal con más tejido graso tenderá a acumular comparativamente, más metal pesado que uno con menos tejido graso. Los peces tienen también tejido graso, aunque no sean llamados “animales de sangre caliente”, lo mismo que algunos invertebrados.
Algunos organismos bentónicos (que viven en el fondo) son por ello, indicadores de contaminación.
Aldo similar ocurre con algunos pesticidas, y ha sido estudiado con pesticidas prohibidos como el DDT.
En ecosistemas acuáticos como el Estuario de Bahía Blanca o el Río de la Plata, los hidrocarburos suelen afectar los estadios larvales (o sea formas juveniles de invertebrados y/o algunos peces).
Las partículas de petróleo se depositan junto con los sedimentos pudiendo dañar a bivalvos y crustáceos tornándolos no aptos para el consumo dado que la exposición crónica a diferentes derivados del petróleo puede tener efectos cancerígenos en la especie humana
METALES PESADOS: La exposición a dosis elevadas interfiere con el funcionamiento de enzimas y proteínas necesarias en el metabolismo celular.
Su toxicidad está además asociada con la forma química en que puedan presentarse, ya que esto impacta sobre su solubilidad en los tejidos vivos.
Pueden provocar desde anemias por disminución en la síntesis de hemoglobina, hasta daño renal y hepático crónico, hipertensión, se ha relacionado inclusive el mal de Alzheimer con el aluminio. El cobre es muy tóxico para los vegetales acuáticos y terrestres porque disminuye la tasa fotosintética, e inhibe el crecimiento.
Estos metales pesados como el cobre, cinc, plomo, cadmio, aluminio, o mercurio pueden modificar variables en el agua variando la solubilidad del oxígeno en el medio acuático o su grado de acidez. Estos factores son determinantes para las diferentes especies de algas del fitoplancton y para el zooplancton. Sabemos que el oxígeno es imprescindible para la respiración de los seres vivos, y los organismos acuáticos, incorporan el que está disuelto en el agua, a diferencia de los terrestres que lo tomamos del aire.
Además los metales pesados sufren un proceso llamado de biomagnificación por el cual van concentrándose más a lo largo de la cadena trófica acuática, uniéndose básicamente a los lípidos (grasas) o proteínas de los organismos vivos.
Tiene una concentración , quizás baja en el agua o sedimento acuático, y va aumentando cuando ingresa al fitoplancton, y aumenta aún más cuando este sirve de alimento al zooplancton, y más todavía cuando estos son el alimento de invertebrados mayores y peces, y, finalmente, más, cuando las aves o mamíferos se alimentan de ellos.
Es más, un animal con más tejido graso tenderá a acumular comparativamente, más metal pesado que uno con menos tejido graso. Los peces tienen también tejido graso, aunque no sean llamados “animales de sangre caliente”, lo mismo que algunos invertebrados.
Algunos organismos bentónicos (que viven en el fondo) son por ello, indicadores de contaminación.
Aldo similar ocurre con algunos pesticidas, y ha sido estudiado con pesticidas prohibidos como el DDT.
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